La única dificultad que entraña este tipo de trabajo es la destreza del operario a la hora de aplicar dicho vinilo "in situ", recordemos que está subido normalmente en una escalera a casi 4 metros en su parte más alta. Si las condiciones climatológicas son adversas el trabajo puede resentirse.
Este tipo de aplicaciones de vinilo suelen hacerse a primera hora de la mañana, cuando las chapas todavía no han recibido el calor de los rayos del sol. ¿Por qué? es sencillo, las chapas calientes dilatan el vinilo y pueden afectar a la calidad final de la fijación (burbujas de aire, estrías, o incluso falta de coincidencia entre piezas de vinilo por mayor o menor dilatación a la hora de aplicarlo, etc).
Otro factor importante a tener en cuenta en este tipo de vallas publicitarias de formato reducido es la visibilidad a la que el público o audiencia debe enfrentarse, son vallas en que la publicidad se ve a pie de calle, demasiado cerca, con lo cual enseguida pueden mostrar imperfecciones que raramente se aprecian en vallas publicitarias de gran formato (que son vistas a gran distancia). La aplicación del vinilo, pues, en este tipo de carteleras publicitarias debe ser minuciosa, pues una pequeña imperfección puede dar al traste con todo el conjunto. Y aunque el transeúnte no advierta ese pequeño error, hay que dar por seguro que el cliente sí lo hará.
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