Como expertos en publicidad exterior, estamos en disposición de afirmar que uno de los elementos que hoy en día suelen utilizarse más a menudo a la hora de poner en conocimiento de la audiencia la venta o alquiler de un inmueble, vivienda o nave industrial (como es el caso de lo que vamos a exponer en este artículo), son precisamente las lonas publicitarias.
La industria gráfica, sobretodo la dedicada al mundo de la impresión digital, apoyo fundamental de todo proyecto publicitario de mediana o gran envergadura, evoluciona a pasos agigantados, esto permite que cada vez los costes sean también más económicos y permita a las empresas trabajar con formatos antes desconocidos a precios asequibles. Las lonas publicitarias son un claro ejemplo de ello, ya que permiten imprimir un mensaje en gran formato para ser instalado en una azotea, sobre una valla de publicidad o, como en el caso que acompañamos en fotografías: sobre una fachada de una nave industrial.
La resistencia de este material lo hace ideal para campañas a medio y largo plazo, ya que la climatología no corromperá ni el mensaje impreso (garantía de tintas mínimo un año) ni mucho menos el soporte (a no ser que una mala previsión en el montaje permita al viento arrancarlo de sus anclajes). Esta versatibilidad favorece y ayuda a que la creatividad pueda ser finalmente reflejada en el trabajo que queremos llevar a cabo.
Para el caso concreto que entramos a debatir en este pequeño artículo se trataba de dar a conocer a la audiencia de paso, que circula por la autopista C-32 que va de Barcelona a Sitges / Vilanova, que la nave está en venta o en alquiler. Los colores ideales para llamar la atención cuando se va a tanta velocidad sin duda son el amarillo y el negro contrastado con el blanco. Poco texto, mensaje claro y conciso. Tenemos que tener en cuenta que los vehículos pasan a gran velocidad por esta vía y no tienen tiempo de leer gran cosa. Somos conscientes de que lo que estamos diciendo no se refleja en las fotografías de esta instalación, por los teléfonos básicamente. Es recomendable utilizar un solo número de teléfono en grande y destacado para poder ser recordado en un instante mientras el copiloto lo apunta. Pero el cliente acaba dictaminando lo que prefiere y, aunque en este caso no es lo más recomendable, así se acaba haciendo (pese a las recomendaciones profesionales derivada de la experiencia de muchos años).
Pese a las inclemencias metereológicas, la amenaza de lluvia y el mal funcionamiento de la plataforma elevadora, acabamos la instalación de esta lona de 9 metros x 3 metros de alto en Viladecans (Barcelona) con éxito. A última hora el cliente advirtió que quería cambiar el mensaje (EN VENTA, el original) por el actual. La indecisión juega malas pasadas, pero la profesionalidad de nuestros equipos y la especialización de nuestra agencia de publicidad en la solución de problemas, acabó adaptando con diligencia y rapidez el mensaje final ocultando el anterior con una banda de vinilo opaco impreso.
El resultado final fue la impresión de una lona publicitaria de 9x3 metros, la instalación a más de 16 metros de altura con una plataforma elevadora sobre fachada de chapa y la aplicación de un vinilo para rectificar el mensaje original según decisión de última hora del cliente. Un trabajo que, aunque parece sencillo, requiere de un equipo experto; no sólo en instalaciones sino también en buscar las mejores soluciones posibles "in situ".
Si necesitas imprimir o instalar una lona de publicidad en una nave industrial, somos especialistas, pídenos presupuesto y verás que con muy poco se puede hacer mucho. Te lo garantizamos.
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