Artículo desarrollado por: Guillermo Campamá
Auditor Jefe TÜV InterCert
Si pudiéramos obtener una fotografía actualizada del tejido empresarial de nuestro país, podríamos observar que son muchas las empresas en nuestro país que disponen de la Certificación ISO 9001 o de la Certificación ISO 14001. Concretamente, y tomando como referencia el XVII Informe de Certificación en España según ISO 9001 e ISO 14001, publicado por Forum Calidad en su revista nº 230 de Abril de 2012, en 2010 un existían un total de 82.394 empresas con Certificación ISO 9001 o Certificación ISO 14001 emitidos por entidades de certificación con acreditación ENAC, teniendo en cuenta que en esta cifra no se incluyen los datos de varias entidades, lo que podría incrementar la cifra en alrededor de 13000 certificados más.
Ante estos números, podemos afirmar que nos encontramos con un mercado de Certificación que goza de buena salud y que si bien no crece respecto a 2010, mantiene el volumen de negocio convirtiendo a España en uno de los países con mayor número de empresas con Certificación ISO.
Sin embargo, si pudiéramos ampliar el zoom a esa fotografía, podríamos ver muchas realidades, casi tantas como organizaciones existen, que nos permitirían como mínimo, analizar la situación desde otra perspectiva. Cada vez son más las empresas que presentan dificultades para mantener sus Sistemas de Gestión certificados. Y cada vez son más las razones que aducen para plantearse el mantenimiento o renovación del mismo, pero siempre con un motivo de fondo que avanza inexorablemente: la crisis. Nunca 8 letras nos habían dicho tanto, y a la vez tan poco: Reducción de personal que dificulta la gestión de los requisitos del sistema, caída de ventas que obliga a recortar “gastos”, reducción de exigencia de la Certificación ISO 9001 o Certificación ISO 14001 por parte de terceros...
Como Auditor Jefe de Sistemas de Gestión, animo a todas las empresas a que valoren el valor añadido que les aporta el Sistema implantado y trabajen por mejorar su eficacia ya que la auditoría ISO no es mas que el motor que empuja para que podamos sacar el máximo partido a todos los requisitos definidos por una Norma ISO.
Creo que los consultores debemos ilusionar a las empresas que nos contratan haciéndoles ver que la consecución de un certificado de calidad o medio ambiente no es sólo otro cuadro para poner en la pared de la oficina, sino en muchas ocasiones, un cambio de hábitos que les ayudará a ser y a SENTIRSE mejores.
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